Sin embargo, la detención hace siete años en Miami de los cinco jóvenes luchadores cubanos contra el terrorismo no careció de violencia y falta de garantías.
Todo terrorista se considera un combatiente de la libertad y desea conseguir algún fin de tipo político mediante el asesinato aleatorio de civiles, so pretexto de que esa acción es defendible dadas las circunstancias.
Con el pretexto de adorar a los dioses había celebraciones religiosas, festines y obras teatrales y sacrificios en forma de carreras, cacerías y peleas de gladiadores.
La interpretación de Bruto, ya sea como luchador abnegado contra la dictadura o traidor oportunista, ha cambiado con las mareas de la historia y la política.