¿Déficit de atención, autismo, dislexia?
¿Tu mente tiene algunos rasgos… un poco raros?
Dicen que "cada cabeza es un mundo" y es cierto que no hay dos formas de pensar –ni dos cerebros– iguales.
Entonces ¿cómo saber si esas características "especiales" tuyas son un trastorno que hay que arreglar o simplemente un rasgo que te hace especial?
Un movimiento de personas autistas le hizo ese mismo cuestionamiento a la comunidad médica: ¿Tienes un trastorno o sólo eres diferente?
La neurodiversidad La historia de las diferencias neurológicas y de conducta es muy curiosa.
Dependiendo de la época y la cultura, una condición, por ejemplo lo que hoy llamamos "trastorno del espectro autista" puede pasar de ser ignorada a considerarse una forma de locura para luego entenderse como una enfermedad que debe tratarse.
Incluso viéndola así, ha ido pasando por diferentes modos de entenderla, categorizarla y tratarla.
Actualmente el consenso médico considera al autismo como un trastorno del desarrollo neurológico, al igual que el déficit de atención, la dislexia, las discapacidades intelectuales, e incluso las lesiones cerebrales.
Pero desde finales del siglo 20 surgió un movimiento por la aceptación autista que dijo que no: que el autismo no es una discapacidad, trastorno o enfermedad a curar, sino que es parte de la variabilidad del cerebro humano, es decir, de la neurodiversidad.