La gente habla de cine siempre de forma personal.
El tema personal es muy diferente dependiendo de las edades.
Es fácil recordar toda una infancia y juventud a través del cine.
Eran escasas las diversiones de nuestra edad y todo se compensaba con ir al cine y ver grandes películas.
Fue el cine el que nos quitó problemas y sobre todo nos dio muchas alegrías.
En la sala de proyección, el público aplaudía sin cesar a sus actores preferidos.
Volver a esos años en estos momentos supone una irrealidad de lo que es la vida.
Ya nada es igual, pero esas películas que vimos hace muchos años nos devuelven a una existencia pasada.
Hoy en día nos gustaría experimentarla una y otra vez.