Además, los aparejos de pesca perdidos o abandonados pueden seguir capturando peces por un período prolongado independientemente del control del pescador.
El pescado capturado se preparó y empaquetó en cajas que llevaban la etiqueta “Producto de Kenya”, y que al parecer estaba ilegalmente destinado al mercado internacional.
El Irán calcula entonces el valor monetario de las pérdidas multiplicando las cantidades reducidas de pescado por los precios medios de mercado de las correspondientes especies.
El Comité observa que el Estado Parte y el autor han expresado opiniones diferentes acerca del posible volumen de pesca en las reservas y zonas adyacentes.
Aproximadamente el 40% de las capturas con este tipo de aparejo eran capturas no deseadas, en particular tortugas de mar, aves marinas y mamíferos de mar.