19.Y que si yo escuchaba solamente el silencio, era porque aún no estaba acostumbrado al silencio; tal vez porque mi cabeza venía llena de ruidos y de voces.
20.Me dirijo a usted en nombre de Manuel, mi vecino, quien ha venido sufriendo las consecuencias de las frecuentes y ruidosas fiestas que celebran nuestros vecinos.