Soy Victor Manuel Díaz Frey, gerente de Bodega de la Ardosa, que está situada en la calle Colón, en la zona de Malasaña, en Madrid.
La bodega de la Ardosa es fundada en 1892 por Rafael Fernández, que es el patriarca, digamos, de una familia vinícola de Toledo que elabora sus vinos en una comarca que se llama La Ardosa.
Entonces ellos abren en Madrid 20, 30 despachos para la venta de su propia producción vinícola.
Después, la tercera generación de esta familia vendió los despachos de vinos y uno de ellos pasó a manos de Gregorio Monje y de Conchita Martín, que son los padres del actual propietario de la bodega, que es Ángel Monje.
Ángel Monje Martín.
Gregorio era un empleado de una carnicería que estaba justo aquí al lado, que se llamaba Carnicería Bolonia, y decidió lanzarse al mundo de la hostelería y cogió este local en alquiler.
En principio se lo alquiló a una tercera persona, pero no funcionó.
Y entonces él decidió dejar su trabajo de carnicero y dedicarse a vender los vinos y los vermús que tenemos en la bodega.
De la mano de Ángel Monje, que es su hijo y el actual propietario de la bodega, deciden apostar por trabajar cervezas de importación.
En ese momento, en España, eso era una innovación.