Buenos días a todas, a todos.
General Ricardo Trevilla Trejo, secretario de la Defensa Nacional.
Almirante Raymundo Pedro Morales Ángeles, secretario de Marina.
Representantes del Poder Legislativo, del Poder Judicial.
Mexicanas y mexicanos, todos.
Este día nos convoca la historia, la memoria viva de nuestro pueblo que nunca ha dejado de luchar por su libertad, por la justicia y por su dignidad.
En este lugar, centro político de la nación, recordamos que hace más de 2 siglos, en la madrugada del 16 de septiembre de 1810, el cura Miguel Hidalgo y Costilla encendió la esperanza y dio voz al anhelo colectivo de independencia.
Aquel "Grito de Dolores" no fue solo un llamado a liberarse de la Colonia española; fue un llamado a la justicia y al corazón y valentía de un pueblo decidido a ser dueño de su propio destino.
El pensamiento de Hidalgo y de los independentistas que lo acompañaron rompía con el orden establecido.
No solo dio el Grito de Independencia, sino que el 29 de noviembre de 1810, en Guadalajara, decretó la abolición de la esclavitud.