Lázaro cuenta su vida
Usted tiene que saber, ante todo, que a mí me llaman Lazaro de Tormes, hijo de Tomé González y de Antona Pérez, que eran de Tejares, un pequeño pueblo de Salamanca.
Cuando a mi madre le llegó la hora del parto, estaba en el molino de harina y me parió dentro del río Tormes, por eso tome el sobrenombre.
Cuando tenía ocho años acusaron a mi padre de haber robado y lo metieron en la cárcel.
Durante este tiempo se preparó una armada contra los moros. Mi padre fue y allí acabó su vida.
Mi viuda madre se fue a vivir a la ciudad y conoció a un hombre negro.
Al principio le tenía miedo, pero viendo que traía pan, carne y leña para calentarnos en invierno, empecé a quererle.
Al poco tiempo, mi madre dio a luz un negrito muy bonito Como el niño veía a mi madre y mí blancos y a su padre negro tenía miedo y señalando con el dedo decía:¡Madre, coco!
Yo decía entre mí: «¡Cuántos debe de haber en el mundo que huyen de otros porque no se ven a sí mismos! » .